Raquel Sanz Sanz, titulada UAX en el Máster Universitario en Ingeniería Industrial el pasado curso académico 2019/2020, concurrió a estos premios que organiza anualmente la Fundación Rodolfo Benito Samaniego, con su Trabajo Fin de Máster basado en el “diseño y análisis por elementos finitos de un respirador”.
Estos premios anuales reconocen a personas individuales y a colectivos que destacan por sus aportaciones al fortalecimiento de los valores de convivencia y tolerancia en la sociedad; así como a jóvenes ingenieros que realizan brillantes proyectos de fin de carrera con aplicaciones sociales.
Con la entrega de los XVII Premios, la Fundación Rodolfo Benito Samaniego realiza un merecido y continuo homenaje a todas las víctimas del terrorismo; impulsa el desarrollo y la innovación en el campo científico tecnológico y promueve los valores de convivencia, paz y libertad, ejes principales y motores fundamentales de la vida de Rodolfo, joven alcalaíno asesinado el 11 de marzo de 2004 en los atentados terroristas de Madrid, que era Ingeniero Industrial.
La alumni de la Universidad Alfonso X el Sabio, Raquel Sanz, recibía una de las dos Menciones Honoríficas de los XVII Premios Anuales el pasado 10 de marzo, en un acto celebrado en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, en el que también fue galardonado su director del TFM, Alejandro Palacios (con quien aparece Raquel en la imagen), profesor del Máster en Ingeniería Industrial. Acudieron al acto acompañados por Juan Carlos Sánchez Rodríguez, jefe de estudios de Ingeniería Industrial de UAX.
“Diseño y análisis por elementos finitos de un respirador”
El TFM de Raquel Sanz está basado en el “diseño y análisis por elementos finitos de un respirador”. Según explica la alumni UAX, “debido a la crisis socioeconómica y sanitaria originada por la COVID-19, consideré oportuno elaborar como Trabajo de Fin de Máster un respirador para la ventilación mecánica asistida en pacientes adultos”.
En su trabajo, la ingeniera presenta un respirador, cuyo diseño está basado “en un mecanismo, formado por un reductor de velocidad de engranajes y un sistema biela-manivela, que comprime la bolsa de aire de un resucitador manual”, comenta Raquel Sanz.
Actualmente, es frecuente entre particulares disponer de impresoras 3D y por ello, argumenta la alumni, “se aplicó como material un polímero que permite la manufactura del diseño desde los hogares. De esta forma, se ofrece una respuesta rápida y económica a la escasez de respiradores en los hospitales”.
Por otro lado, para comprobar que el modelo estaba dotado de unas dimensiones correctas y un material apto, la ingeniera comenta que “aplicó un análisis por elementos finitos donde, entre otros aspectos, se pudo ver qué parte del mecanismo es más susceptible al desgaste y a la rotura en el tiempo”.
Debido a que en el Máster en Ingeniería Industrial de UAX se imparte formación en Arduino (también presente en el TFG de otra alumni UAX premiada recientemente), Raquel decidió “ligar esta electrónica al respirador”.
La alumni muestra su agradecimiento a Alejandro Palacios, director del TFM y su profesor durante sus estudios universitarios, tanto en el Grado en Ingeniería Mecánica como en el Máster en Ingeniería Industrial. Con él ha adquirido conocimientos en diseño asistido por ordenador y análisis por el método de elementos finitos, “que me han ayudado mucho a la hora de realizar el TFM”, resalta Raquel.
Para la alumni UAX, este premio “resulta muy satisfactorio para concluir mi etapa en la Universidad Alfonso X el Sabio y comenzar mi carrera profesional”.
Todos los años, el Colegio de Ingenieros Industriales de Madrid (COIIM) y la Fundación Rodolfo Benito Samaniego, en colaboración con la Asociación de Ingenieros Industriales de Madrid (AIIM), lanzan este concurso para los estudiantes de Ingeniería Industrial, por lo que “animo a futuros ingenieros a que presenten sus trabajos y puedan ver ellos mismos lo gratificante que es recibir un premio otorgado por esta fundación, en memoria a un joven Ingeniero Industrial fallecido en los atentados del 11M”, concluye la ingeniera.